Vitamina D lactancia y estilo de vida

En octubre de 2008, la Academia Americana de Pediatría recomendaba que los bebés reciban 400 IU por día de vitamina D, comenzando desde los primeros días de vida. Los niños que no reciben suficiente cantidad de vitamina D están en riesgo de padecer raquitismo, y tienen un riesgo aumentado de padecer infecciones, enfermedades autoinmunes, cáncer, diabetes, y osteoporosis.

La vitamina D es mayormente incorporada al organismo por medio de la exposición a la luz solar, y en forma secundaria a través de las comidas. Los estudios científicos muestran como los nuevos estilos de vida en donde se prevalece más tiempo en lugares cerrados y se fomenta el uso de protectores solares, ha llevado a que las reservas de vitamina D, en la mayoría de las mujeres, se vea severamente disminuida. La habilidad de adquirir la cantidad adecuada de vitamina D por medio de la luz solar depende del color de piel, de las personas y del lugar geográfico donde vivan. Las personas de piel >oscura requieren más tiempo de exposición solar, como unas seis veces más que una persona cuya piel es mas clara. Las personas que viven cerca del Ecuador pueden obtener vitamina D durante los 12 meses del año, mientras que aquellas personas que viven cerca del polo norte o sur, solo pueden sintetizar vitamina D por seis meses o incluso menos dependiendo de la ubicación geográfica.

Los bebés amamantados en forma exclusiva, reciben toda la vitamina D que necesitaban por medio de la leche materna, siempre y cuando la madre la tenga en niveles adecuados. Los profesionales al cuidado de la salud ahora poseen un mejor entendimiento de la función que esta vitamina cumple en nuestro organismo y de los requerimientos nutricionales de la misma. Los estudios y estadísticas indican que un gran porcentaje de mujeres no posee la cantidad adecuada de esta vitamina en sus organismos.

las madres que amamantan a sus bebés y cuyas reservas corporales de vitamina D son adecuadas, pueden proveer suficiente cantidad de vitamina D a sus bebés por medio de la leche humana. Se recomienda que las mujeres embarazadas o que están amamantando obtengan suficiente vitamina D por medio de la exposición solar o con suplementos en caso de que sea necesario. En caso que las mujeres no estén seguras acerca de los niveles de vitamina D en su organismo, deberían solicitar evaluación médica con examen sanguíneo para detectar los niveles antes de consumir suplementos.